La Costa Brava y su interior, L’Empordà, son unas de las zonas turísticas más autenticas y bien conservadas de la costa mediterranea. El carácter de sus pueblos, la gastronomía y la belleza de sus paisajes son valores seguros a la hora de tomar tu decisión para planificar unas vacaciones con éxito asegurado.
L'Escala
L'Escala es sin duda el lugar ideal para conocer nuestra zona, pues es uno de los pueblos con más ambiente de la Costa Brava. Cuenta con una muy buena oferta gastronómica, sobretodo para comer el mejor marisco y pescado fresco. L'Escala tiene diversas playas: la del pueblo, la de Riells y en sus dos extremos tenemos dos de las playas más bonitas de la Costa Brava: Cala Montgó al sur y Empúries al norte con sus Ruinas Greco-Romanas, desde donde nos contemplan 2000 años de historia. En ambas playas encontraremos sugerentes chiringuitos donde refrescarnos con un buen mojito hecho al momento.
L’Estartit
L’Estartit, en el centro de la Costa Brava, está considerado como un importante núcleo turístico. En Las Islas Medes y Parque Natural de la Costa del Montgrí se pueden practicar todo tipo de deportes náuticos: submarinismo, kayak, paddle surf... Recorrer esta costa, la Cala Pedrosa, la Cala Ferriola, la Foradada... es accesible bien a pie empezando el recorrido en el Cap de La Barra, donde tendremos oportunidad de admirar las vistas desde los acantilados o bien en barco, contratando en el puerto una de las múltiples empresas que se dedican a las excursiones. L'Estartit tiene también una buena oferta lúdica y gastronómica: Las terrazas del Puerto, su zona de bares nocturnos y la calle Santa Anna que hará las delicias de los más aficionados al “shopping”.
Pals
La zona de Pals y su Playa, característica por su llanura llena de arrozales y también conocida por su campo de Golf, es un destino ideal para desconectar y pasar unos días en familia, tanto en sus magníficas playas de arena dorada como la Playa del Racó o La Illa Roja (playa nudista) como callejeando por el antiguo pueblo de Pals, uno de los núcleos medievales más bien conservados de “L'Empordá”. Este encantador pueblo también destaca por sus restaurantes. No debes dejar de degustar un auténtico arroz a la cazuela ampurdanés, denominación de origen de Pals.